Por
Antonio Luis Aguilera
Rafael Sánchez González |
El domingo 22 de enero falleció en su querida Córdoba Rafael Sánchez González, un aficionado
excepcional a la Fiesta de los toros, de la que era toda una referencia, una fuente de información cristalina para
resolver cualquier duda o consulta histórica sobre los hombres del toro, desde el más humilde hasta el más célebre, ya fuera ganadero, matador,
banderillero, picador, mozo de espadas o simple aficionado. Daba igual, Rafael era la persona a la que todos recurríamos para plantear preguntas, por complejas que fueran, que solo él contestaba con solvencia y maestría.
Tuvimos la suerte de contar con su
amistad, de compartir interminables conversaciones taurinas, donde daba gusto escucharle por el dominio y la seguridad que transmitía, por la singular familiaridad con que manejaba esa historia del toreo que tanto le apasionaba. Como compañeros de programas taurinos en las emisoras de radio locales, fuimos juntos muchas ocasiones como invitados a tertulias en peñas, asociaciones o entidades públicas y privadas, donde su saber entusiasmaba cada vez que explicaba la importancia de Córdoba en cualquier estamento del toreo; hasta —le gustaba apostillar— en la maravillosa gastronomía de guerra de las mujeres de los más humildes del toreo, de la gente sencilla del «Barrio», que de la necesidad hicieron virtud y, para saciar el hambre de los suyos, cocinaron lo que nadie quería de los despieces con tal maestría y sabor, que terminaron por convertir aquellos platos de batalla en algunos de los que actualmente son más demandados en los mejores restaurantes.
De la importancia de sus conocimientos dan fe los artículos publicados en este blog, donde por nuestra amistad colaboró ilusionado desde su creación, hasta que la enfermedad fue mermando su calidad de vida. El pasado mes de diciembre, próximas las fiestas de Navidad, hablamos con él por última vez. Lo notamos recuperado y así nos lo reconoció, mostrando sus ganas de ponerse al día en las lecturas taurinas atrasadas, y de terminar alguno de los textos que tenía esbozados para editarlos en esta «Plaza de la Lagunilla», que tantas veces honró con magistrales lecciones sobre la historia del toreo.
Rafael Sánchez, un erudito de la historia del toreo |
Rafael Sánchez González fue un erudito de la historia del toreo en general y la de Córdoba en particular. Su saber sobrepasaba el de cualquiera, pues desde joven sintió la inclinación de investigar personalmente la historia, visitando a familiares y parientes, por lejanos que fueran, de la gente del toro, a personajes y comerciantes del «Barrio» del Campo de la Merced, por insignificante que pareciera su oficio, a los que preguntaba sobre la vida y obra de sus admirados hombres del toro. Hablaba con nietos, biznietos, tataranietos, vecinos, tenderos, zapateros, taberneros o simple gente de ese barrio que apasionadamente calificaba «el más torero del mundo». Rafael interrogaba, pedía fotos antiguas, fotocopiaba documentos destinados al olvido, que consideraba determinantes para explicar el curso de la historia, esa que como investigador del toreo le gustaba explicar meticulosa y magistralmente. Su curiosidad por conocer a cada personaje hizo de Rafael un aficionado distinto a todos, una verdadera referencia histórica —«aunque luego nadie cita la fuente de la información», nos decía— para conocer cualquier capítulo de la Tauromaquia.
Preciosa es la huella que deja en este blog, con textos magistrales como «El Barrio y la dinastía de los Poleo»; semblanzas de su admirado «Lagartijo» —por quien decía tener debilidad por su figura, torería, sencillez y desprendida humanidad. «Y porque no tenía familiares como «Guerrita para que contaran su historia»—; la magnífica cronología de la soberbia torería del genial Rafael Guerra Bejarano; sin olvidarse nunca de los grandes banderilleros o los picadores, de los que apostillaba: «la caballería es la parte de la tropa más importante en una cuadrilla».
A continuación relacionamos todos los trabajos que vieron la luz en «Plaza de la Lagunilla», el blog que por amistad enriqueció expresando su sabiduría. Siempre serán un lujo para los aficionados que aman la historia del toreo, por esa razón facilitamos su acceso a modo de homenaje al querido compañero, de quien en sucesivas ediciones rescataremos otros textos magistrales. Solo nos queda reiterar nuestro sentido pésame a su esposa Pilar y demás familia, condolencia que extendemos al maestro y entrañable amigo José María Montilla, decano de los matadores de toros cordobeses, pareja inseparable durante décadas de Rafael Sánchez en la información taurina de radio y televisión.
Descanse en paz nuestro amigo Rafael, un aficionado excepcional.
Para facilitar la búsqueda de los textos de Rafael Sánchez González, enlazamos el título con el artículo.
Fecha |
Título |
8/12/2021 |
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8/11/2021 |
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23/9/2021 |
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22/8/2021 |
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15/8/2021 |
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16/6/2021 |
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16/3/2021 |
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9/2/2021 |
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2/1/2021 |
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27/11/2020 |
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21/11/2020 |
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8/10/2020 |
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9/9/2020 |
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4/8/2020 |
Relación de la dinastía de los
“Gallo” con varios toreros cordobeses |
6/3/2020 |
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1/1/2020 |
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3/11/2019 |
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16/10/2019 |
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2/10/2019 |
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23/9/2019 |
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20/9/2018 |
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14/9/2018 |
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21/7/2018 |
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27/6/2018 |
6 comentarios:
Amigo Antonio. Siento mucho la perdida que ha supuesto para ti la pérdida de un amigo y referente en la apasionante afición por el mundo del toro.
Gracias por las lecciones de humildad recogidas
en todos
tus artículos.
Una maravilla de texto. Bellísimo y real todo lo que de Rafael se dice.
Mi enhorabuena y mi agradecimiento como amigo de Rafael y como beneficiario de sus eruditos textos.
Un abrazo
D.E.P.
Se merece un reconocimiento y una calle en su ciudad.
Promulgo la moción!!!!!!
Gracias Antonio Luis, hemos perdido un amigo y un pozo de sabiduría.
Tuve la suerte y el privilegio de conocer a D. Rafael Sánchez González en aquella ruta manoletista que se organizaron José Morente y Antonio Luis Aguilera, allá por noviembre de 2016. A los mismos pies de la Torre de la Malmuerta, nos cautivó con su relato sobre el barrio que vio crecer a Manolete. Nos transmitió una pasión, un conocimiento y un amor a la historia de la tauromaquia fuera de lo común. Desde aquel día, me convertí en fiel un seguidor de sus escritos, a través de este querido blog de la Plaza de la Lagunilla.
Sólo puede decirle, muchas gracias Rafael. ¡Seguro que Dios le ha abierto de par en par las puertas del Cielo a este ilustre cordobés! ¡Ya habrá entablado amistad y tertulia con los califas del toreo, Lagartijo, Machaquito, “Guerrita” y sobre todo con Manuel Rodríguez, de los que tantas cosas nos contó!
Q.E.P.D. y mi más sentido pésame para los familiares y amigos como tú, Antonio Luis.
Un fuerte abrazo.
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